
NOTAS PRINCIPALES
limón amarillo,
clementina, neroli, musgo y vetiver.
Ana María Orsini, princesa francesa de Nerola, en Italia, cerca a Roma, decidió en 1680 usar como perfume el aceite del naranjo amargo, también llamado la naranja andaluza. Parecía una gran excentricidad, pero desde entonces el aroma de Neroli, cuyo nombre celebra a su descubridora, sigue siendo la mezcla perfecta de azahares, especias melificantes y un toque metálico que hace que “ veamos” casi su olor fluorescente, cítrico y antiguo y siempre novedoso.